Sugerencias para conservación

  1. Nunca sumerja sus zapatos en el agua ni los lave en la lavadora, si se moja por cualquier motivo, déjelos secar naturalmente a la sombra.
  2. Jamás haga secar sus zapatos exponiéndolos directamente al sol. Séquelos solamente en la sombra y nunca acelere el secado en estufas, hornos, secadoras, cocina o detrás del refrigerador. El contacto con altas temperaturas afecta algunos componentes de los zapatos.
  3. Antes de aplicar productos para dar brillo o lustrar sus zapatos, la limpieza de estos requiere Ide un proceso de tres pasos: Sacar el polvo con paño o gasa humedecido en agua y jabón neutro, cubrir con crema para zapatos (la neutra es la mejor) y lustrar la fibra (escobilla de cerdas blandas), que además de darle brillo, cubre al zapato con una protección contra los golpes y cortes. No utilice lejías, ni jabón que contenga soda o cloro.
  4. Después de la limpieza y antes de aplicar cera, grasa, cremas o mousses a los zapatos, haga una prueba en un área menos visible para verificar que el producto utilizado es compatible con el cuero o material que compone el zapato.
  5. Para reducir los olores causados por la transpiración después del uso, dejar el. zapato en un lugar aireado, es aconsejable pasar un paño húmedo embebido en mezcla de agua y vinagre incoloro.
  6. Se recomienda un periodo de 24 horas de descanso para el zapato, por eso evite el uso del mismo zapato para todos los días. Esto aumenta su durabilidad y evita que aparezca el mal olor.
  7. La utilización de zapatos de cuero puede marcar la región de flexión de los pies, surgiendo pequeños dobleces en los materiales, lo que no significa defecto, ya que el propio componente utilizado muestra la adaptación de los materiales a los movimientos del usuario.
  8. En el caso de derrames, secar el líquido inmediatamente con un paño limpio o una esponja absorbente seca. No frotar.
  9. En el caso de manchas con aceites o grasas consulte en tintorerías especializadas. Recuerde que el cuero es piel y son muy susceptibles a la absorción de estos fluidos.
  10. Nunca utilice: Jabón de Glicerina, limpiadores abrasivos, barniz, detergente u otros productos de limpieza, alcoholes o agua de amoníaco.